La carga de la botella se hará en la mayoría de los casos en el centro de buceo, tanto si la botella es de nuestra propiedad, como si no, debemos asegurarnos que cumplan con la normas de carga y personal cualificado para la tarea. Hay básicamente dos cosas que deben preocuparnos al cargar una botella de nitrox. El riesgo de fuego o explosión debido al contacto con trazas o restos de hidrocarburos como los producidos por los lubricantes y aceites usados en los compresores de llenado de botellas
Los mezcladores de los centros reputados usan aire compatible con oxígeno. Como mencionamos antes, nunca llenaremos una botella que se ha cargado con aire normal con nitrox, pues el riesgo de que las impurezas contenidas en el aire puedan reaccionar con el oxígeno es un peligro real y de consecuencias que podrían ser mortales. Las botellas para nitrox deben ser usadas siempre exclusivamente para este propósito.
Nuestra segunda preocupación es hacia el tipo de mezcla que han cargado en nuestras botellas. Como buceadores certificados sabremos en todo momento que mezcla necesitamos para estar en concordancia con el propósito de nuestro inmersión, es decir, no podemos, planear una inmersión a una profundidad máxima de -35m con nitrox 36% en nuestra botella, porque como veremos más adelante, la MOD para un nitrox 36% es de-29m, excediendo de este modo, la profundidad máxima, exponiéndonos a un riesgo muy alto de sufrir una intoxicación del SNC por oxígeno.
Toda botella cargada con nitrox debe ser verificada antes de entrar al agua con ella para que cumpla con lo pedido. Para ese cometido analizaremos la mezcla de nuestra botella, con un analizador de O2 especial para este propósito. Los centros deben tener al menos uno para realizar la verificación después del cargado. Algunos centros no “confían” en la habilidad del buceador en el manejo del analizador o simplemente no lo prestan por miedo a que lo rompas o no lo trates cuidadosamente. Recuerda que están en su derecho pues el analizador más sencillo del mercado no cuesta menos de 120€.
En cualquier caso, si eso ocurriera, nosotros estamos en nuestro derecho de estar presentes mientras el miembro del centro analiza nuestras botellas. No se puede negar a eso, si así fuera debemos descartar la inmersión. Un error en el análisis y marcado puede ser la causa de un accidente de buceo. En las secciones posteriores veremos el peligro que supone sufrir una intoxicación por oxigeno.
Al contrario de la narcosis, la toxicidad por oxigeno no avisa antes de ocurrir. Nunca debemos dejar nuestra vida en manos de terceros. Afortunadamente, esas situaciones no suelen darse a menudo, una vez verificada la mezcla con nuestros propios ojos, damos nuestra conformidad. En las secciones siguientes veremos el proceso completo de análisis, verificación, marcado y firma de documento.